Muy cerquita de Narbona, en el sur de Francia, podéis visitar Las salinas de l’ Île de Saint Martin (Francia). Realmente maravillosas. Las salinas ofrecen un espectáculo de colores alucinante. Allí, os podréis acercar a conocer el cultivo de ostras y descubrir el proceso de obtención de la sal. Muy, muy curioso. ¿Os apuntáis?
Viajeros…¡Allá vamos!



¿Dónde se encuentran las salinas de l’île de Saint Martin ? ¿Cómo llegar?
Las Salinas de l’ Île de Saint Martin se encuentran en Gurissan, a unos 20 minutos de Narbona y a 1 hora de Perpignan. Con esta dirección: Musée du Sel, 11430 Gruissan, Francia llegaréis sin problema. Justo en las salinas hay un gran aparcamiento donde podréis dejar el vehículo de manera gratuita.
¿Qué hacer en las salinas de la Île de Saint Martin?
Las salinas se encuentran en Gruissan, un pueblo rodeado de agua y coronado por la torre de Barberousse. El pueblo me enamoró enseguida.
Dejarse llevar por las calles de Gruissan es un imprescindible si decidís visitar las salinas. Además, encontraréis un paseo que recorre la isla y es ¡Espectacular! Podéis recorrerlo andando, en bicicleta etc. Además, está lleno de aparcamiento. En épocas de poco turismo no debe ser complicado aparcar en cualquier lugar del paseo.




1.Hacer una visita guiada por las salinas andando o en patinete eléctrico:
ANDANDO: Existe la posibilidad de conocer las salinas a través de una visita guiada. Se recorren las salinas en poco más de una hora. Os dejo por aquí el enlace para reservar los tours.
PATINETE: Si no queréis andar, tenéis la posibilidad de contratar una visita guiada en patinete eléctrico. Tenéis la opción de 1 hora o 1:30h. Los niños deben tener mínimo 12 años para participar en la actividad.
Por aquí os dejo el enlace para reservar la visita de 1 hora en patinete y por aquí el de 1:30h.
El precio de la ruta en patinete es mucho más cara que la visita andando, pero la experiencia puede ser mucho más divertida. ¿Verdad?


2. Comprar sal y otros productos regionales en la tienda de las salinas
En la tienda encontraréis un montón de productos de la zona y sal de muchísimos tipos. Si bien es una tienda enfocada al turismo, los precios no son demasiado desorbitados. Además, la tienda es muy chula. Aunque no queráis comprar nada yo me daría una vuelta. A ver si sois capaces de no caer en la tentación.
3.Visitar el museo gratuito
El museo se encuentra en la tienda y es de libre acceso. La visita os permitirá aprender más sobre la cosecha de la sal. El museo ofrece una exposición de herramientas antiguas utilizadas para trabajar la sal.
4. Tomar algo con vistas alucinantes
RESTAURANT LA CAMBUSE DU SAUNIER GRUISSAN:
Aquí encontraréis comida y bebida para todos los gustos. Además, también hay unas mesas situadas frente las salinas. ¡Una pasada! Eso sí… si vais durante el atardecer, no os dejéis el repelente de mosquitos.
BAR GLACIER
Una zona de descanso ideal. Es un rinconcito para degustar todo tipo de cócteles. Los hacen para todos los gustos, desde los más típicos hasta grandes selecciones de licores de todo el mundo.


5.Darse un masaje ¡UN MASAJE!
Sí, sí… lo habéis leído bien. Darse un masaje en este entorno idílico es posible. Tenéis distintos masajes para escoger. ¡Una auténtica locura! Os dejo el enlace aquí para reservar si os apeteciera. A mí no me dio tiempo a darme ninguno pero… Me lo apunto.
Mis consejos
Si queréis ir en fechas especiales o en meses de vacaciones yo os aconsejo que reservéis los tours a través de la página web. En setiembre el restaurante estaba bastante lleno a última hora de la tarde y se veía movimiento. En marzo estaba algo más calmado.
Visitar la zona durante el atardecer es una auténtica pasada. Los colores van cambiando y el reflejo del cielo es alucinante. Sin embargo, no os paséis de tarde porque sino va a resultar más difícil ver y diferenciar las tonalidades del agua.
Conocer Gruissan sí o sí. El pueblo os regalará postales que no podréis borrar de vuestra retina. Una vez más, os aconsejo pasear al atardecer. ¡Mirad!

¿Dónde alojarse?
Gruissan no ofrece mucho alojamiento. Quizás os será más fácil encontrar un apartamento antes que un hotel. Sin embargo, la poca oferta hace que el precio enseguida sea elevado. Os recomiendo que reservéis con mucha antelación o os será realmente difícil encontrar algo.
En Narbona si reserváis con tiempo, podéis encontrar habitaciones triples por unos 50€. Además la ciudad de Narbona merece una visita.
Perpignan, si no os importa conducir 1 hora os ahorraréis mucho en el alojamiento, siempre que os vaya bien con el recorrido que estéis haciendo.
Yo reservé el alojamiento el mismo día que visité las Salinas. En Narbona no encontraba nada por menos de 180€ la noche por una habitación doble de lo más sencilla. Conseguí una habitación similar por 50€ en Perpignan.
¿Os apuntáis a conocer Gruissan y visitar las salinas de l’île de Saint Martin?